HOLLYWOOD, EUA.- Mediante su cuenta de Twitter, la actriz Lena Headey quien interprenta el papel de Cersei Lannister en ´Games of Thrones’, detalló el acoso sexual que padeció de manos del Harvey Weinstein, otrora poderoso mandamás de Miramax.

Lena Headey contó que el primer hecho data desde el 2005, tiempo en que conoció al productor de Hollywood.

“a primera vez que vi a Weinstein fue en el Festival de Cine de Venecia, donde se presentaba la película ‘El secreto de los hermanos Grimm’, en cuyo rodaje sufrí un interminable bullyng por parte del director Terry Gilliam”, mencionó la actriz.

Headey prosiguió al indicar que Weinstein la invitó a pasear por los canales y fue ahí que la conversación se tornó extraña, según relató.

Le acompañé hasta que se detuvo y me hizo un comentario sugerente, un gesto, al que yo respondí con una risa porque estaba verdaderamente en shock. Recuerdo pensar que era una broma y decirle algo tipo ‘Venga, hombre, sería como besar a mi padre’. así que nos fuimos a tomar algo con el resto del equipo y nunca más volvieron a llamarme para actuar en una película de Miramax”.

El siguiente encuentro con el productor, relató la actriz, “(…) fue en Los Ángeles. Por alguna razón creía que nunca se atrevería a volver a intentar algo conmigo, no después de haberme reido en su cara y decirle que eso no iba a pasar ni en un millón de años. Pensé que respetaría el límite que le puse y que quizás sólo quería hablar conmigo de trabajo”, continuó.

Ella relató que fue durante un desayuno donde Weinstein volvió a abordarla sexualmente. “Me hizo algunas preguntas sobre su vida sentimental, pero yo derivé la conversación hacia algo menos personal. Después se fue al baño y cuando regresó me dijo: ‘subamos a la habitación, quiero pasarte un guión’, explicó.

Caminamos hacia el ascensor y de repente algo pasó que puso todo mi cuerpo en alerta. Según subíamos le dije a Hervey que no estaba interesada en otra cosa que en el trabajo, que por favor no pensara que subía con él por otros motivos. ‘No va a pasar nada’, le dije. No sé que me llevó a hablar así en ese momento, pero sentía que tenía que hacerlo”, indicó.

A Harvey no le gustó esa reacción y la situación fue a peor. Se quedó en silencio. Furioso. Pero cuando salimos del ascensor, él caminó por detrás de mi con su mano sobre mi espalda sin decir una sola palabra. Me sentía totalmente indefensa”, aseguró Headey.

Intentó abrir su habitación con la tarjeta pero no funcionaba, y aquello terminó por enojarlo. Así que me acompañó de nuevo al ascensor agarrándome del brazo, pidió que trajeran mi coche y me susurró al oído: ‘No le digas a nadie nada sobre esto. Ni a tu manager ni a tu agente’. Entonces me senté dentro y rompí a llorar”, concluyó.