Dejemos esto claro desde el principio: ni tú, ni yo, ni nadie, esperaba una película de un equipo de superhéroes. El tiempo, hiriente y necio nunca nos demostró que se podía hacer tal producto, si rememoramos veremos que las películas de Super héroes vivían en su propio universo, y no había esa interacción que uno como lector de cómics sabe que existe. Esto no se trasladó siquiera en nuestras épocas, salvo la excepción de X-men (Bryan Singer, 2000) como muchos lo dirán, pero honestamente… las películas de los hijos del átomo no presentan una dinámica de equipo, es más como un Wolverine y sus lacayos, para bien o mal de aquellos fanáticos de la franquicia.

Los años pasaban, y veíamos a Spiderman en solitario, Hulk en solitario, carajo… la 20th Century Fox era la dueña (relativa) de mucho de los derechos de Marvel, y de todos sus personajes y ¡no hubo jamás una interacción entre ellos! esto hacía que uno con sorpresa abriera la boca y surgiera un enorme “¿Qué?” cuando al final de “Iron Man” (John Favreau, 2008) apareciera un enigmático Nick Fury a ofrecer una interesante oferta a nuestro mamón favorito.

Los Vengadores se volvió la película más esperada en la vida de muchos. La gente recuerda con cariño cuando un evento cinematográfico apareció frente a sus narices: Star Wars, Gremlins, Terminator 2, Harry Potter, El Señor de los Anillos, películas que nos hacen recordar la principal función del cine: entretenimiento (aunque puristas reclamen a los cuatro vientos esta noción). Pero la particularidad de esta película frente a las mencionadas es que Los Vengadores resultó ser una de las primeras películas en invadir cada espacio de nuestras vidas, en nuestras ajetreadas y socialmente tecnológicas vidas. Estaban en lo que bebíamos, lo que comíamos, lo que usábamos para ir a la escuela, lo vestíamos, lo veíamos en la televisión, era de lo que platicábamos y se volvió parte de un elemento sociocultural pocas veces visto.

Han pasado los años y a vísperas del nuevo capítulo ¿Por qué funcionó la película? y más importante ¿Funciona con el paso del tiempo, sin el boom del inicio?

En una base secreta de la agencia S.H.I.E.L.D se está llevando a cabo un gran experimento, un experimento que incluye el infame Tesseract, un cubo rubik de poderes incalculables. Mientras hacen la investigación, gracias a los esfuerzos del Doctor Erik Selvig, surge un portal y vemos que Loki, quien aparentemente había desaparecido de nuestras narices en Thor tiene un cetro de control con el que captura a Hawkeye y al doctor Selvig. Nick Fury que está presente en el experimento reacciona y trata de llevarse el Tesseract, pero es inútil ya que Loki logra hacerse del objeto escapando de las instalaciones… es entonces que Fury, prepara a Natasha Rommanoff “La Viuda Negra” y al agente Coulson para reunir al grupo de hombres excepcionales para detener al Dios sediento de poder, es hora de que Los Vengadores salgan a escena.

Hay dos elementos para la fórmula ganadora de la película, la primera de ellas es la interacción de los personajes. En un principio antagónica,es hasta que deciden poner esto de lado y aportar al bien de la humanidad sin individualismos que el equipo surge de la manera más gloriosa. Si uno ha leído cómics, encontrará que esta dinámica es la clásica de cualquier crossover o súper equipo(sea DC o Marvel). La historia no trata de ser una revelación o una red compleja, es sólo un grupo de sujetos que se enfrentan a un supervillano con un ejército de desposables, nada del otro mundo, pero la dinámica lograda por Zak Penn y su guión, lleno de momentos de humor entre los miembros del equipo (ustedes saben, como tu grupo de amigos), este logro también proviene de Joss Wheddon, que conoce de antemano las dinámicas de grupo por su experiencia en la televisión y en los cómics.

Esto se divide en cada personaje que aporta algo para cierto sector del público, como todas las películas de grandes equipos; Creo que los que me sorprenden más son Black Widow y Loki. La primera me resulta sorpresiva porque realmente Scarlett Johansson no era mi ideal para interpretar a la espía rusa, es muy frágil y pequeña en comparación con su contraparte de las viñetas, pero tenía fe en Wheddon y su preferencia feminista de sus personajes, le pone mayor énfasis que en Iron Man 2, la hace agradable y también podemos vislumbrar un poco de su pasado y el peso de este en el personaje, y encima de eso vemos a Johansson dar piruetas en el aire con agileza, y un estilo de pelea de lucha libre.

Además de que hay algo atractivo en la fanfarronería de la actriz y que se traslada a su personaje sin esfuerzo alguno, y es pelirroja ¡puntos extras por ello!

El otro es Loki. Si bien no es el mejor villano de la historia de las películas, me encanta que esta lo  retrate más como un niño berrinchudo, y que no todo le sale bien. Tom Hiddleston se divierte con su papel, logrando a ser amenazador, burlón, tonto (muy, muy tonto), y tan presuntuoso que piensa que nada le puede hacer daño, el equipo le da su merecido y de una manera tan gloriosa y fascinante que nunca olvidaré esos gritos de celebración la primera vez que la vi.

La segunda parte de esta fórmula, es el ritmo y la acción, la película se pone a presentarnos al equipo y su dinámica por la primera hora, pero pasada esa hora tenemos una parte dedicada a la acción y secuencias apantallantes. Yo no sólo encuentro satisfactorias las secuencias y los muchos momentos de la película, encima de todas estas explosiones y muertos, hay un mensaje de esperanza… un mensaje de esperanza que resona mucho en nuestra generación ya que somos la que presenció el 9/11, la muerte y el miedo representado en nuestro televisor. La película se vuelve un mensaje de gracias a esos héroes que ante la tragedia salen a hacer el bien común, y eso se representa entre los ciudadanos que tratan de ayudar a los demás y a los vengadores. Curiosamente este mensaje de esperanza creo que es más accidental que formulado, la película no obtuvo patrocinio de parte del ejército y es por ello que no vemos ni una pizca de los militares en la película, pero creo que no pierde su impacto, y al final vemos las miles de reacciones de los ciudadanos por el evento. Este pequeño elemento es MUY importante, nos permite ver los múltiples puntos de vista de los afectados, vemos gente buscando a sus familiares con pancartas, niños emocionados, gente que piensa que son un amenaza, otros llorando (el cameo de Stan Lee muy sutil), una película que no nos permitió ver esto fue “El Hombre de Acero” (Zack Snyder, 2013) y esto es muy importante, pues de cierta forma hace más terrenal la idea de que la gente pueda hacer algo asombroso y nuestras opiniones al respecto.

También debo referir el gran trabajo de Alan Silvestri, con un tema que resona en tu cabeza como pocos en estos tiempos y que suena como el de una película que estuvo perdida en los 80’s, estás plenamente consciente de que es una película muy divertida, y por ende redonda.

Es un tema, muy corto, con un sintetizador que abarata las cosas en un punto ¡pero es glorioso! y es del mismo sujeto que hizo Volver al Futuro, por si te lo tenías pensado.

He encontrado gente que la odia, pero a decir verdad no encuentro el por qué, en su mayoría porque no lo dicen. Esto representa un fenómeno social muy común en el que las personas se hartan de un producto por verlo tan seguido que comienzan a tenerle repudio, pasa en todas las generaciones y clases de películas. Si me pongo a analizar Los Vengadores, encuentro como su mayor error el poco uso de Hawkeye y que en casi toda la película se vuelva un sirviente sin carisma ni nos adentramos en saber quién es ¿Eso es un error fatal? no creo, tiene una redención el personaje, y no demerita a la película de todas las demás cosas buenas que tuvo, es cuestión de la balanza y si esto afecta al final.

No deja de ser un evento fascinante, en el que uno recuerda con cariño la euforia que causó, los gritos de emoción que se soltaron en su momento, y al volver a ver la película, estos vuelven a nacer en el interior de cada espectador. Te pega en una fibra sensible de emoción, de volver a recordar cuando eras lector de historietas mientras te cortaban el pelo o por dedicación completa, o cuando ideabas grandes batallas con tus juguetes por horas sin que nadie más te molestara y sin las presiones de la vida cotidiana.

No se apenen, fuimos la generación que vio el punto cumbre de una película de superhéroes en su punto más alto como la montaña rusa que es, y eso es imposible de olvidar ¿El género debe madurar? por qué no, pero el tiempo lo dirá.