Busca PVEM tipificar “zooerastia” en Guanajuato

GUANAJUATO, GTO.- Con el objeto de tipificar el delito de zooerastia, el grupo parlamentario del Partido Verde Ecologista de México presentó una iniciativa de reforma al Código Penal.
Con la propuesta se busca penalizar la agresión sexual hacia los animales, entendida como cualquier acto de naturaleza sexual cometido por una persona en contra de un animal, imponiendo su voluntad sobre un ser vivo incapaz de consentir.
Al dar lectura a la exposición de motivos de la propuesta, la diputada Luz Itzel Mendo González manifestó que el maltrato animal es un síntoma de un entorno social disfuncional y violento. Precisó que, en hogares o comunidades donde ha existido abuso interpersonal, los animales a menudo son víctimas colaterales o, peor aún, herramientas utilizadas para ejercer control o intimidación.
Asimismo, comentó que ese fenómeno demuestra que el maltrato animal es un eslabón crítico en la cascada de la violencia que se vive en la sociedad, ya que la crueldad no permanece aislada, fluye de un ser vivo a otro y de un contexto a otro.
Mendo González señaló que la violencia hacia los animales ha sido históricamente un fenómeno normalizado y minimizado, pese a sus graves implicaciones éticas y sociales. Agregó que cuando se tolera el daño contra animales, se envía un mensaje que legitima la violencia como mecanismo válido, perpetuando un ciclo que puede escalar hacia agresiones contra personas.
La congresista manifestó que dentro del universo de los actos violentos contra los animales que históricamente han sido invisibilizados por tabú o por desconocimiento, se encuentran los actos sexuales, conocidos técnicamente como zoofilia, zooerastia o bestialismo; comportamiento que constituye una forma de abuso, pues implica la imposición de la voluntad del ser humano sobre un ser vivo incapaz de consentir.
Puntualizó que la tipificación explícita de esa conducta permitirá terminar con los vacíos legales, garantizando una protección efectiva a los animales y reconociendo que su bienestar comprende no sólo su integridad física, sino también su integridad comportamental, emocional y etológica.
Finalmente, remarcó que tipificar la zooerastia fortalece la protección de los animales como seres sintientes, reconociendo su valor y su derecho a vivir libres de abuso y explotación, y que, al sancionar esa conducta, el Estado envía un mensaje claro contra la normalización de la violencia y afirma que la integridad emocional, física y etológica de los animales es un bien jurídico digno de tutela.
Con estas reformas se plantea establecer que se impondrá de uno a cuatro años de prisión y de sesenta a trescientos días multa, a quien dolosamente induzca la penetración de un animal hacia una persona o le introduzca por vía vaginal o anal el miembro viril o cualquier otra parte del cuerpo, objeto instrumento sexuales; posea material pornografía o con fines de donde se utilicen animales con fines sexuales, para su venta, distribución, exhibición o difusión.
Se agrega que las penas se aumentarán hasta en una mitad, cuando el acto sexual con animales sea videograbado, fotografiado o registrado por cualquier medio por el sujeto activo y posteriormente difundido.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Justicia para su estudio y dictamen.
