Estudiosos de la historia de los huesos descubrieron en Australia un cementerio de mamiferos que pesaban hasta dos toneladas, una especie antecesora del canguro y de otros marsupiales modernos.

Esta clase de animal era herbívoro y tenía una bolsa en la que cabría un hombre. Su nombre dominguero es Diprotodonte y vivió miles de años hasta el tiempo en que aparecieron los seres humanos en aquel continente, quienes probablemente los usaron como bolsas de dormir.

En el lugar, ubicado en Queensland, encontraron alrededor de 50 esqueletos, uno de estos, con una mandíbula de más de 70 cm, era de los menos madreados que se hayaron, y los investigadores lo apodaron “Kenny”.

Es la mayor concentración de restos fósiles de uno de los mamíferos de mayor tamaño de la historia, y los paleontólogos del equipo están que se orgasmean, además de que esperan sacar de todo eso un buen de información sobre el estilo de vida de este abuelo gigante de osos y wombats.