Este miércoles cuatro de febrero,  fueron velados los restos de Mónica Orta Ramírez, enfermera del Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, que falleció el martes pasado por las lesiones que sufrió salvando la vida de varios recién nacidos durante la explosión del pasado 29 de enero.

Con su fallecimiento, el número de muertos tras la explosión subió a cuatro, dos mujeres y dos niños.

Entre lágrimas y aplausos fue que unas 200 personas, entre familiares y amigos, se dieron cita en el lugar donde se realiza el adiós de a quien consideran una heroína de la tragedia que sucedió apenas hace unos días en la ciudad de México.

con información de CNN en español.