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VENTAJA MÍNIMA PERO VENTAJA

LEÓN, Gto.- Ventaja chiquita… pero al fin ventaja, ya la hubiera querido el Cruz Azul. Con un futbol chido, muy chido, y que a la postre sirvió para demostrar que así como los Verdes atacan también saben defender, León venció al Toluca por la mínima en la ida de las semifinales de la Liga MX en el Estadio León.

El encuentro inició con su respectiva dosis de egoísmo, ninguno de los dos equipos se prestaba la pelota, así bien gachos, sin embargo con dos que tres chances los locales ya iban dejando claro que en casa se iba a respetar al campeón, que a los de verde, en su cancha, no se vale jugarle al valiente.

Pequeño gigante

El ambiente se sentía cool, la banda, que cumplió con una buena entrada aunque la tribuna del mero pueblo (la de Sol 5) lució una pequeña zona desierta cortesía de la reventa, alentaba con intensidad; Además había visitantes distinguidos pues el estadio contó con la visita del patrón de México: Carlos Slim.

Pese al buen juego, los fans verdes se tuvieron que tragar las ganas de gritar el gol cuando al minuto 16 Talavera detuvo el remate de Boselli con la cara, golpe que un ratito más tarde, además de mucho dolor y riesgo de quedar feo, le daría un pase directo al banquillo entre aplausos de los asistentes… sepa por qué, pero le aplaudieron neta.

Para colmo, “Tala” que presuntamente ya tiene lugar en el vuelo directo a Brasil para divertirse como loco, comer, beber y jugar el mundial, viviría un ligero, (por no decir breve) momento de humillación garrafal.

Tras 23 minutos de juego, La fiera marcó el primero de la noche gracias a un fabuloso remate de cabeza de Luis Montes… ¡ah caray!… ¡No, no lo lea dos veces! Montes remató con fuerza y colocación desde el manchón penal, sin marca, para poner adelante a los de casa.

Rojo intenso

Para la parte complementaria, o lo que es lo mismo, el segundo tiempo, la Fiera trató de mantenerse con el mismo tenor, sin embargo la… enorme regañada de Cardozo a sus muchachos, exceptuando a Sinha por cuestiones de la edad, cobró efecto.

Los Diablos salieron respondones pero nivel grosero, dominaron la pelota buena parte del complemento e incluso se dieron el lujo de dejar ir por lo menos tres oportunidades que les hubieran dado el empate o la victoria.

A pesar de la peligrosa actitud de los de rojo, León también tuvo las suyas ante el “Chícharo” Lozano que terminó el partido con una anécdota digna de contársela a sus nietos: Le sacó un balón del ángulo al mismísimo Rafael Márquez. León tenía oportunidades pero no concretaba.

Para finalizar, el duelo se tornó intenso, barridas fuertes, empujones por doquier, faltas constantes, jugadas peligrosas, el partido terminó como deben hacerlo todos: con el silbatazo final.

Con este resultado, la escuadra de Matosas deberá meterse al infierno, sin protección divina, aunque sí con bloqueador para eso del calor, buscando hacer la hombrada y calificar, por segundo torneo consecutivo, a la final de la Liga MX para buscar el ya tan ansiado bicampeonato.

 

Foto: Imago 7

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