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ABARCA SE DICE PERSEGUIDO POLÍTICO

MÉXICO, D.F.- La PGR subió ayer a su portal web la versión pública de la investigación del caso Iguala, que consta de unas 54 mil fojas divididas en 85 tomos y 13 anexos.

De ahí se desprende que el ex alcalde de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca Velázquez, se negó a declarar ante el Ministerio Público Federal, sin embargo, en una demanda de amparo calificó los hechos del 26 de septiembre como “actos repudiables”.

En el escrito integrado al expediente, Abarca sostuvo que no cometió ningún delito y que es sujeto de una persecución por el cargo que desempeñaba.

“Y esa persecución nace por el hecho de ser presidente municipal en Iguala, Guerrero, donde acaecieron actos repudiables de los cuales de forma infamante se me trata de involucrar y de ahí el que recurro ante la justicia federal”, apuntó.

En la demanda, Abarca relató que el 26 de septiembre de 2014, luego de que su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, rindió su informe como presidenta del DIF local, se retiró a su casa a las 21:00 horas.

Que a las 9:30 el secretario de Seguridad Pública le informó por teléfono que en la central de Iguala estudiantes de la Normal de Ayotzinapa secuestraban autobuses, y que Abarca le dijo que se mantuviera en calma, que sólo se llevarían los autobuses.

Pero a las 22:00 horas el secre le informó que junto al Palacio Municipal hubo balaceras y estampida de personas, y que Abarca ordenó que se abrieran la presidencia para que las personas entraran y se protegieran.

Luego Abarca dijo que al consultar las redes sociales supo que había muertos y heridos, por lo que ordenó al jefe de la Policía investigar. Pasada la medianoche se le confirmó que hubo un ataque contra el autobús del equipo de futbol de los Avispones.

“Al día siguiente, sábado 27 de septiembre de 2014, en las primeras horas del día, me enteré de las consecuencias graves de los hechos relatados, por lo cual el ayuntamiento tomó la decisión de suspender mi informe de gobierno municipal, que me correspondía hacer ese día”.

“Dada la gravedad de lo acontecido, lo lamentable de los hechos y a efecto de no entorpecer las investigaciones a cargo de la Procuraduría General de Justicia del Estado, solicité a Gobierno del cabildo municipal de Iguala licencia temporal”, manifestó.

A las 2:30 horas del 4 de noviembre, la “pareja presidencial” Abarca y Pineda fue detenida en el Edomex; el ex alcalde se reservó su derecho a declarar ante la SEIDO, al igual que su esposa.

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