En un gesto que ha traído un rayo de esperanza a la devastada población de Gaza, los aviones de transporte C-130 del ejército estadounidense realizaron su primer lanzamiento aéreo de ayuda el sábado 2 de marzo.

Esta acción llega en un momento crítico, después de que la tragedia golpeara a aquellos que buscaban desesperadamente alimentos, enfrentando las consecuencias de meses de operaciones militares israelíes.

La urgencia de la situación humanitaria en este enclave costero superpoblado ha sido puesta en evidencia por la Organización de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, que informa que más de medio millón de personas, una cuarta parte de la población, están al borde de la hambruna.

El lanzamiento aéreo estadounidense no sólo llevó alimentos, sino también un mensaje de solidaridad y apoyo. Más de 38 mil comidas fueron arrojadas a lo largo de la costa mediterránea de Gaza, en una operación que contó con la colaboración de las fuerzas jordanas.

Estos suministros vitales llegaron en un momento crítico, cuando las esperanzas de acceso humanitario por tierra se vieron frustradas debido al asedio implacable.

El impacto de esta acción no se limita a la entrega de suministros básicos; es un acto de humanidad en medio del conflicto y la desesperación. Se produce solo dos días después de un incidente trágico en el que soldados israelíes dispararon contra una multitud hambrienta que se acercaba a un convoy de ayuda humanitaria en el norte de Gaza.