CHIHUAHUA, CHI.- Un juez sentenció a 9 años de prisión a uno de los cinco menores que torturaron, asesinaron y enterraron al niño de 6 años Christopher Raymundo Márquez Mora, al resto de los menores les dio rehabilitación en libertad.

A casi tres meses de que se cumpla un año del crimen del pequeño que conmocionó a la opinión pública internacional por el alto grado de violencia que le impusieron los agresores, Jesús David recibió la pena más severa de 9 años en un tribunal tutelar, y otro menor de la misma edad fue considerado inimputable por padecer un retraso mental leve.

A Irving de 12 años, Alma Leticia, de 13, y Valeria Janeth, de 12, se les dictó sentencia de 3 años y 6 meses de libertad asistida, por ser menores de 15 y por lo tanto inimputables.

El Código Penal del Estado dice que la pena máxima para un menor se incrementó de 5 a 9 años de cárcel el año 2013, pero sólo se aplica a mayores de 15 años y los menores de esta edad resultan inimputables.

JUEGO Y SAÑA

El homicidio del pequeño Christopher, ocurrido en mayo de 2015, en el fraccionamiento Laderas de San Guillermo II etapa, municipio de Aquiles Serdán, en Chihuahua, fue cometido por cinco menores: dos mujeres de 13 años, dos varones de 15 y un menor de 11; quienes invitaron al niño a jugar y juntar leña en la ladera del arroyo, lugar en el que le indicaron que simularían un secuestro.

Acto seguido, ataron a Christopher de pies y manos, comenzaron a golpearle con un palo espinoso y lanzarle piedras en el rostro. Después, colocándole un palo en el cuello, lo sofocarían.

Una vez que los adolescentes creyeron muerto al pequeño, cavaron un hoyo para enterrarlo boca abajo y posteriormente, una de las jóvenes le apuñaló por la espalda.

Para ocultarlo, sepultaron completamente el cuerpo, taparon el lugar con maleza y colocaron un animal muerto sobre la superficie para no llamar la atención.

Tres de los menores asesinos de Christopher eran sus primos.