“El hombre del revólver de oro”, eso era lo primero que me llamó la atención de niño ¿qué clase de estupidez era un revólver de oro? pero este enigma que decía en voz alta era para evitar otro pensamiento, estaba viendo un villano de Bond elegante como muchos, pero amenazador, tomando en cuenta su altura y su afinidad para matar… no mentiré, esa vez que vi la película por primera vez con mi padre, temía mucho por la vida del 007, muy a pesar del ambiente similar de “Operación Dragón” (Robert Clouse, 1973), lo que me quedó marcado de esa aventura era Francisco Scaramanga.

Ese era Christopher Lee, uno de los mejores para interpretar villanos en la historia del cine.

Hoy, sus familiares confirman que el Domingo, Christopher Lee falleció a los 93 años; la causa de su muerte fue por problemas respiratorios que ya le estuvieron aquejando desde semanas anteriores.

Sin dudas Christopher Lee deja un legado inquebrantable así como la vida un sujeto extraordinario. Su primer papel como actor fue de niño como Rumpelstiltskin (¿Notan un patrón aquí?) pero su primer estelar en el cine fue en “La maldición de Frankenstein” (1957), donde interpretó al monstruo de Frankenstein (uno muy grotesco por cierto), esta película fue producida por Hammer films, una empresa dedicada casi en su totalidad a los filmes de horror; tras este trabajo Lee obtuvo lo que quizás haya sido su papel más famoso: Drácula. El actor estuvo en un gran número de películas del príncipe de la oscuridad, muy a pesar de que estos papeles no eran más que un vampiro alto y que gruñía a la cámara, Lee siempre quiso hacer algo más complejo que esta interpretación de Drácula pero el estudio nunca lo dejó. Muy a pesar de esto, el papel de Christopher Lee se ganó el cariño de fanáticos del horror, y resultaron ser películas rentables para Hammer. Lo que el actor pudo sacar de estas películas, fue una amistad con Peter Cushing, quien era su eterno némesis Van Helsing, actor que falleció antes que el, y que incluso tuvo un papel en Star Wars como el general Grand Moff Tarkin, a lo cual Lee tendría un papel en la saga interestelar como el Conde Dooku.

Y si de alguna forma nunca tuviste contacto con el Drácula de Hammer, es muy probable que lo recuerdes como el mago que le ayudó al señor oscuro Sauron. Lee siempre quiso interpretar a Gandalf, tenía el honor de ser la única persona en la producción de “El señor de los anillos” que conoció a Tolkien; ávido lector de esta saga, optó por el papel de Saruman ante su avanzada edad, una decisión que le agradecemos eternamente ya que era increíble su aspecto físico que contrastaba totalmente con el de Ian Mckellen como Gandalf.

Y por si esto fuese poco, también era fanático del Heavy Metal, llegando a sacar discos de Metal sinfónico donde narraba la historia de Carlomagno, dos veces…. a sus 91 años.

Aquí una canción de los que fueron sus colaboradores mas frecuentes: Rhapsody of Fire.

https://www.youtube.com/watch?v=z16_mx1edG0

 

La muerte de Christopher Lee, si bien me deja muy triste, también me deja pensando en que este hombre, a pesar de su edad, seguía viviendo su vida con normalidad y felicidad, haciendo lo que le gustaba. Le agradaba que la gente lo reconociera por sus trabajos, y a pesar de que sus colaboraciones cinematográficas fueron siendo menores, lo hacía con el mismo entusiamo de antes. Cuántos de nosotros no pensamos en vivir hasta una edad no cercana al centenario, tememos este concepto, y Christopher Lee nos enseña que cada día cuenta.

Una extraordinaria vida, un extraordinario actor, un extraordinario ser humano, descanse en paz, Christopher Lee.

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