LÁZARO CÁRDENAS, MICH.- Como si se tratara de una escena de una filme de ciencia ficción o terror, un chavo de unos 30 años fue asesinado y su cadáver arrojado a un santuario de cocodrilos en Lázaro Cárdenas.

Turistas que paseaban por el estero Barra de Santa Ana, infestado de los saurios, se toparon con el cuerpo que era ya carcomido por los animales, incluso una de las piernas del cadáver fue mutilada; estaba maniatado.

El joven fue identificado como Venancio Soberanis Pantoja, de 20 años y que tuvo su hogar en la colonia Vista Industrial, de este puerto; posiblemente fue asesinado a la orilla del estero de Santa Ana.

El cadáver fue arrojado junto al primero de los humedales del bulevar costero Bicentenario, de Playa Jardín hacia Playa Azul, sitios que están infestados de saurios.