MÉXICO, D.F.- Por fin Enrique Peña Nieto fue a Guerrero, pero no a Iguala como al principio se dijo, sino al paradisíaco puerto de Acapulco, no sin antes enviar a la fuerza federal de para brindarle todas las medidas de seguridad.

Así, el priista puso en marcha un nuevo plan para Guerrero que consiste en cinco puntos: la creación de un fondo especial, un programa de empleo temporal, la pavimentación de calles, un programa especial de turismo para impulsar la temporada vacacional decembrina.

Antes, y a 69 días de la desaparición de 43 normalistas en Iguala, en Coyuca de Benítez convocó a Guerrero a superar la etapa de dolor por la que atraviesa por este crimen y reconoció que marcará un hito en la historia de México, “pero que hoy es momento de superarlo sociedad y autoridades para promover el desarrollo y la prosperidad en este estado”.

Ahí entregó el puente Coyuca que derribó la tormenta “Manuel”, en septiembre del año pasado.

Dijo que Iguala es un hecho lamentable que ha provocado indignación en la sociedad, “que nos ha llevado a hacer una introspectiva de que no vuelva a ocurrir, son hechos que lastiman a toda una sociedad que quiere vivir en paz, en orden”.

Recordó que el miércoles en Iguala se puso en marcha el operativo especial conocido en la zona de Tierra Caliente, Guerrero, Estado de México, y Morelos, se reforzarán las acciones para hacer frente a los delitos que más lastiman a la sociedad.